Redaccion 
Necesitamos a muchos Dactah Chando en el mundo. Es la conclusión a la que se puede llegar fácilmente cuando se escucha el cuarto tema que nos presenta el santacrucero de un disco, Camino, con el que alcanza su plenitud musical.
Desde hace unos días se puede disfrutar de Salvaje Oeste, un cuarto single y otra de las piezas musicales destacadas del último disco de Dactah Chando, una canción acústica, sencilla, a voz y guitarra, el último corte del álbum que rompe completamente con la línea de la producción del décimo disco de Chando, estrenado en noviembre del año pasado y en el que hay de todo en cuanto a sonidos. Con Salvaje Oeste nos transporta a un mundo distópico y solitario en el que no queda nada ni nadie debido a la salvaje pérdida de valores que nos asola.
Salvaje Oeste viene a completar cuatro singles con fantásticos videoclips que merecen más allá de una visualización; merecen más bien una reflexión, y desde luego una escucha calmada, pues estamos ante el mejor disco de un artista de extenso recorrido (diez álbumes en su haber), que nos invita, con esta letra, a reaccionar ante un mundo dormido, artificial y deshumanizado, y a reflexionar también sobre quiénes somos realmente y el planeta que estamos dejando a los que vienen detrás, en parte debido a la pérdida de valores y de humanidad.
Salvaje Oeste es una canción que evoca paisajes desérticos e inmensos en los que la calma y el viento transportan a lugares muy profundos de nuestra mente, en la que sin duda hay que escarbar para encontrar claves que nos permitan seguir. El tema, lento, contiene un potente mensaje de paz, humanismo y de mirarnos hacia nosotros mismos para ver de qué pasta estamos hechos. La letra es cruda, directa y clama hacia la reflexión sobre la pérdida de valores y la artificialidad con la que parecemos “depositados en este presente tan incierto”, advierte el artista.
Además del contundente mensaje de la composición, Dactah Chando sabe de la importancia del mejor acompañamiento visual para una letra. Es por ello que estos adelantos de Camino, y los videoclips creados para estas canciones, han resultado ser obras de arte para las que se ha alineado con el mejor equipo que podía imaginar, Diwa Films.
El videoclip de Salvaje Oeste se fusiona a la perfección con la crudeza de la letra y muestra al compositor caminando cansado, desorientado en un mundo distópico y apocalíptico, armado de una guitarra, donde ya no queda nada ni nadie, donde nos hemos acribillado unos a otros y solo, por honor, queda alguien que es capaz de cantarle a lo que realmente importaba, la humanidad, el amor y la honestidad.
Foto: promocional
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