Redaccion 
Maravilloso concierto el protagonizado por el trompetista Dave Douglas que se presentaba en el horario y en el escenario previsto (20:30 horas) del Espacio Cultural de CajaCanarias en Santa Cruz de Tenerife y dentro del marco que estamos analizando en las últimas fechas, el Festival Internacional Canarias Jazz & Más Músicas Creativas. En esta ocasión, fría entrada de público para un concierto espectacular como pocos.
Uno de los aciertos de la noche fue el pequeño teatro de la Fundación Cajacanarias que dotó de una sonoridad al concierto alejada de aquellos otros escenarios que hacen perder la concentración. El sonido fue elegante en todo momento y la tensión de público y músicos hizo de ésta una cita verdaderamente especial.
El trompetista norteamericano, de New York para más señas, venía con el recién lanzado proyecto Gifts debajo del brazo. Lo había publicado en su propia casa discográfica Greenleaf Music y con respecto al álbum había un cambio en el saxofonista ya que en la edición de estudio había participado James Brandon Lewis. Además y para disponer de toda la información el nuevo proyecto Gifts consiste en un tributo en uno de los nombres del jazz más tristemente olvidados, Billy Strayhorn (siempre a la sombra del gigante duque, Duke Ellington en su carrera) y en canciones propias. Por su parte, fue una lectura alejado del swing clásico y era menester que interviniese la imaginación de músicos muy capaces para llegar a las cotas de improvisación requeridas.
Foto: el cuarteto de Dave Douglas en acción. Luz Sosa.
Resumiendo, músicos muy capaces, increíbles de hecho y con desborde en la imaginación, un proyecto bonito y todo ello se dispuso a las maravillas del público santacrucero dentro del Festival.
A Dave Douglas le acompañaba Jon Irabagon al saxo tenor, Rafiq Bahtia a la guitarra y Ian Chang a la batería y complementos electrónicos ambos. Irabagon y Douglas era la parte más veterana del cuarteto y tuvieron la conexión justa y necesaria con dos imaginativos músicos que ponían también fantasía y valor al resultado final. En el cuarteto no se echó en falta al saxo que sale en el disco ya que el nacido en Chicago (USA) y procedente de Filipinas hizo también las delicias del respetable con intervenciones de auténtico lujo. Sin embargo, ahí no quedaba, naturalmente la banda, Douglas se hacía dejar descansar por intervenciones verdaderamente lujosas de Rafiq y de Ian siendo verdaderamente efectivos en cada uno de sus cometidos y además, lo hacían de manera sobresaliente.
¿El repertorio? Las canciones fueron las mismas que en el disco Gifts y hubo momentos de auténtico oro en la sesión. Especialmente Take the a train, Rain Check y Blood Count sonaron verdaderamente lujosas y armónicas en la noche como tributo inigualable al genio Billy Strayhorn y que también firmaba Duke Ellington en su época. Y esto sin que signifique un menosprecio a las canciones de Douglas que eran también unos ejercicios de genialidad paso a paso. Alguien podría tener la duda de cómo funcionaría las canciones sin bajo, pero tanto con sonidos electrónicos como con la guitarra se complementaba el audio sin ningún tipo de problema.
En definitiva, fechas de las que hacen afición, de contacto con la música avant garde aunque con respecto a la tradición y que por desgracia hubiera sido más redonda si hubiese contado con mayor afluencia de público tinerfeño. De las mejores fechas del Festival Internacional Canarias Jazz & Más que sigue como una verdadera exhalación.
Foto: Luz Sosa (Festival Internacional Canarias Jazz & Más)
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