
El pasado 27 de junio en el Búho Club, en San Cristóbal de La Laguna, tuvimos la oportunidad de disfrutar de The Bottles. He aquí la banda de covers más atípica de la historia del rock. La copla de León y Quiroga abre el show, empatada con el Y sin embargo te quiero, del maestro Sabina, y tal cual hacía el flaco jienense.
La cosa marchaba bien con Tennesse Whiskey, del gran Chris Stappleton, o Don’t let the Old Man in, de Toby Keith, calientan a los melómanos de pro, y aquí cristaliza, con ese sabor sureño, la sensación de estar viendo a unos locales Fleetwod Mac, con las dos vocalistas, Laura Pérez y Alicia Morales, al frente.
O mejor aún, a un émulo de Delaney, Bonnie and Friends en la actualidad. Los estándares del American Songbook se suceden: Dream a little dream of Me, o Have you ever seen the Rain, de la CCR, así cómo una reivindicación racial potente con himnos cómo I Put a Spell on You, de Screamin, Jay Hawkins, el tema de El color púrpura Miss Celie, Blues, de Quincy Jones, o la irresistible I’d Rather Go Blind, de Etta James, versionada por todo dios (interpretada ésta semana por Rod Stewart en Glastonbury, sin ir más lejos). Y abrimos otro melón, el fabuloso recorrido por grandes frontwomen de todos los tiempos.
Desde la citada performer negra, hasta Nancy Sinatra, y su These boots are made for walking, pasando por Linda Perry de 4 Non Blondes y su clásico 90’s What’s Up, y savia nueva cómo la sin par Imelda May (Sixth Sense) o la malograda Amy Winehouse (Back to Black). La alineación suena bien empastada, fluída y versátil, fruto de años de trabajo en diferentes formaciones (Besos Negros, Bocatuerta, Las Ratas, etc..).
Sus componentes, José Sosa, Pablo Rodríguez, Rafa Martín y Carlos Esparza se desenvuelven con soltura, desde el No puedo vivir sin ti, de Los Ronaldos, hasta (para el que ésto escribe, la más prescindible del set list) El Sol no regresa. Y por ahí se iba a producir el clímax del recital, enarbolando bandera castellano-parlante, con Bolero Falaz, de Los Aterciopelados, o la sublime versión del You Never Can Tell, de San Chuck Berry, que los Auseron titularon como Quién lo iba a suponer para su vibrante proyecto Las Malas Lenguas, que un servidor tuvo oportunidad de disfrutar en vivo hace veinte años… todo ello regado con el vino de Tacoronte Acentejo, espiritoso acompañamiento de una velada donde hubo de todo y para todos.
Foto: Cartel de la cita
Texto: Adrián Gómez, colaborador