Este miércoles 10 de diciembre de 2025 ha fallecido Robe Iniesta, a los 63 años, el mítico cantante, compositor y alma de Extremoduro, según anunciaron su agencia y su discográfica oficial.
Robe nació en 1962 en Plasencia, Extremadura, y desde muy joven mostró una fuerte inclinación hacia la música y la poesía. A mediados de los años ochenta, concretamente en 1987, fue uno de los fundadores de Extremoduro, una banda que desde sus inicios desafió las normas del rock comercial con una estética cruda, visceral, honesta, lejos del glamour de la industria, y con letras que hablaban sin tapujos de marginalidad, deseo, rebeldía y vida real.
A lo largo de más de tres décadas, Robe fue la voz y la pluma detrás de canciones que se convirtieron en himnos generacionales: composiciones como “So payaso”, “Salir”, “La vereda de la puerta de atrás”, “Golfa” o “Dulce introducción al caos” marcaron una época. Con discos emblemáticos como “Agila” (1996) o “La ley innata” (2008), Extremoduro se consolidó como una de las bandas más influyentes del rock en español.
Con el paso del tiempo, Robe evolucionó: dejó atrás en gran parte la autodestrucción de sus primeros años, abrazó la madurez artística, y transformó su rebeldía en profundidad lírica.
En noviembre de 2024, Robe canceló urgentemente los conciertos finales de su gira tras ser diagnosticado con un tromboembolismo pulmonar, una afección grave que le obligaba a guardar reposo absoluto. Este diagnóstico ya había generado preocupación entre sus seguidores, y tras ese anuncio, Robe compartió un mensaje ambiguo que muchos interpretaron como una despedida definitiva.
El comunicado oficial con el que se anunció su muerte describe su partida como “la nota de prensa más triste de nuestra vida” y lo despide como “el último gran filósofo, el último gran humanista y literato contemporáneo de lengua hispana, y el cantante cuyas melodías han estremecido generaciones”. La nota, sin embargo, no detalla la causa exacta del fallecimiento.
Algunos medios señalan que las complicaciones derivadas de su problema pulmonar podrían haber influido en su muerte, aunque oficialmente no se confirma.
El legado de Robe es inmenso: transformó el rock español con su intensidad, su sinceridad brutal y una capacidad lírica pocas veces vista. Sus canciones eran más que música: eran confesiones, gritos, reflexiones, poesía cargada de rabia, ternura, nostalgia y verdad. Su influencia trasciende géneros y generaciones — muchos lo recuerdan hoy no solo como músico, sino como poeta y como voz de quienes no encuentran otra. Tras su muerte, las redes, las radios y los escenarios se llenan de homenajes, recuerdos de conciertos, de letras que se tararean, de lágrimas y de respeto.
Hoy, España y buena parte del mundo musical lamentan su pérdida. Se espera que en los próximos días se anuncie un homenaje oficial en su ciudad natal, Plasencia. Su figura — irreverente, intensa, honesta — deja una huella profunda que difícilmente se borrará.
Foto: promocional





