
El pianista Giuliano Parisi nos presenta su último disco que lleva por título Blind Light (Temps Record, 2018). Según sus propias palabras, grabó este disco en un tiempo delicado de su vida, muy sufrido. En él se pueden encontrar estupendas piezas desde el punto de vista compositivo y también una banda tremendamente cohesionada. Tanto la percusión, como la batería, el piano, el bajo y como la armónica, actúan como un solo cuerpo y se sacrifican a favor de la misión final.
No se pierdan este último disco de Giuliano Parisi, Blind Light. Es una buena receta para abandonar tiempos de zozobra y evitar la luz cegadora.
– ¿Cómo fue el crecimiento educativo y profesional de Giuliano Parisi como pianista? ¿Recuerda alguna fase de su instrucción que fuera especialmente importante para usted?
– Giuliano Parisi: Empecé los estudios musicales a los 7 años. Recuerdo con mucho cariño el esfuerzo de mis padres para llevarme a clase en un pueblo a 40 km de nuestra casa, dos veces a la semana. Iba a estudiar el primer año de piano encima de la mesa del salón, porque todavía no tenía un teclado. Recuerdo una tarde, cuando 4 hombres subieron a los 21 escalones de mi casa un piano de pared, tenía 9 años.
Estudié piano clásico, jazz y composición musical en el Conservatorio de Música de Frosinone. En el 2012, gracias a una beca de la Unión Europea, me ofrecieron dar clases en el Conservatorio Superior de música de Alicante, como asistente de la profesora de Improvisación y coordinando mis seminarios de jazz para los alumnos del centro.
Hoy cuento con 4 discos grabados y editados, conciertos en toda Europa con mis proyectos y colaboraciones que abren al multidisciplinar: danza contemporánea, teatro, cine. Además, sigo con mi profesión de educador en varios conservatorios de España y de productor de proyectos culturales.
– Blind Light es el título de su último disco, ¿Qué nos puede contar de esa luz cegadora?
– Giuliano Parisi: Blind Light fue un trabajo muy sufrido, estaba pasando por un momento muy delicado de mi vida, los temas son todos autobiográficos y cada uno cuenta una historia. Realmente no hay un hilo conductor entre ellos, pero si en mí. Se puede decir que hay un antes y un después con este disco.
Trabajando en los arreglos, quise utilizar las percusiones mediterráneas en algún tema y la armónica para dos baladas, las que realmente nos traen en una historia dramática, aunque llenas de optimismo.
– 9 canciones, ¿Se quedó con alguna en el tintero?
– Giuliano Parisi: Para este proyecto no. Es perfecto así, con nueve composiciones. Además, me encantan los números primos.
– Tenemos entendido que lleva enseñando piano en España algún tiempo ¿Dónde se ha producido esta labor? ¿Qué nivel encuentra en los jóvenes pianistas?
– Giuliano Parisi: Empecé en Alicante y luego en Castilla y León en los Conservatorios de Salamanca y Zamora. El nivel es muy bueno y estoy muy contento de tener la posibilidad de trabajar en lo que me gusta. Esto me permite aprender siempre algo nuevo. Hablo de la educación musical.
– Preséntenos a la banda que integra su plantel en este disco, Blind Light ¿Cómo los conoció?
– Giuliano Parisi: La banda de Blind Light está formada por Julio Fuster al contrabajo. Él es un gran músico y mejor persona, me ayudó mucho durante las sesiones de grabación y le tengo mucha consideración y respeto. Es un gran contrabajista, unos de los mejores de este país. Lo conocí en mi primer disco Introducing myself. Es una seguridad.
Pere Munuera es el batería. Julio me lo presentó, es un músico con una sensibilidad y gusto fuera de lo común. Control dinámico impecable. Además es una persona encantadora. Imprescindible
Carlos Ronda Mas es el percusionista. Es un músico con una gran experiencia de grabaciones de estudio y con una densa agenda de conciertos, es un lujo para mi tenerlo en este proyecto. Aportó elementos enriquecedores para Blind Light.
Quique Pedrón “El Palmera” toca la armónica. Es un músico increíble con un cerebro musical de los más interesantes que he tenido la posibilidad de encontrar hasta ahora. Es alicantino y muy activo en la escena musical local. Su instrumento principal es el piano, pero toca también el saxo, batería, el bajo y la harmónica.
– ¿Qué diferencias hay entre este último disco (Blind Light) e Introducing Myself (Temps Record, 2015)? ¿Encontró mayor confort con respecto a la primera experiencia en éste último?
– Giuliano Parisi: Son dos trabajos totalmente diferentes entre sí. Introducing myself en primer lugar es a trío y Blind Light lleva un abrigo instrumental más amplio. Las composiciones tienen una consecuencia casi lineal en Introducing myself y en Blind Light cada tema es un mundo distinto. Por último, mi carga emotiva y mis solos son totalmente diferentes: un acercamiento más cerebral en el primer disco; más de “barriga” en el segundo.
– Aunque Canción a quemarropa es eminentemente musical como medio no podemos abstraernos de la realidad, ¿Cómo está pasando estos días referentes al operativo de coronavirus (Covid-19)?
– Giuliano Parisi: En mi casa, respetando las normas gubernamentales. Estudiando, componiendo, reflexionando sobre lo que está ocurriendo.
– ¿Tiene informaciones con respecto a Italia? ¿Tiene familia en el país transalpino?
– Giuliano Parisi: Estoy al día de las informaciones de Italia, mi país está viviendo una situación muy complicada, mi familia se encuentra en la cuarentena preventiva y espero que todo esto pase pronto.
– ¿Cómo le afecta la crisis con respecto al negocio? ¿Puede dar clases a través de redes sociales? ¿Ensaya bastante? ¿Cómo ocupa la cabeza en estos momentos tan malos?
– Giuliano Parisi: Doy mis clases online, hay muchas herramientas para esto. Practico, sigo estudiando y leyendo. Me alimento, por supuesto, e intento estar con ánimo optimista.
– Quiere darle una recomendación a la gente que esté leyendo esta entrevista ¿Quizás le manda un saludo a los lectores? Gracias por su tiempo.
– Giuliano Parisi: Recomiendo conciencia. Después de esta crisis muchas cosas habrá que cambiarlas, sobre todo nuestra actitud y autoconciencia respecto a todo lo que nos rodea. Necesitamos cuidar de nuestro planeta y sobre todo cuidar de nuestra pequeña comunidad, nuestro circulo de familiares y amigos. Ser ciudadanos atentos y activos dentro de nuestro barrio o ciudad. Con pequeños gestos podemos mejorar las cosas.
Gracias a todos los lectores y a ti, Héctor
Un abrazo sin virus a todas y todos.
Foto: AGS Photoart.