Nuevo proyecto y nueva entrevista a Chema Peñalver, que acaba de publicar Mode On, su importante contacto con formaciones de gran formato. En Chema Peñalver, un viejo conocido de esta plataforma, hay un músico con una gran cantidad de destrezas y capacidad de adaptarse. De hecho, la crisis del covid, según su propio testimonio, no supuso ningún tipo de freno para su publicación, quizás un indeseado e inesperado acicate. Se centró en componer repertorio original y después, a pesar de las restricciones lógicas, grabó a 17 músicos. El resultado: Modo on. Enciéndanse con este nuevo lanzamiento de Sedajazz (Valencia) ¡Y no cedan a la tentación de apagarse!.
– ¿Fue desde el comienzo el clarinete su primera opción como instrumento? ¿Toca algún que otro más?
– Chema Peñalver: Sí, el clarinete fue mi primera opción y lo sigue siendo, aunque también toco los saxos, especialmente el saxo tenor. Además de encantarme su sonido, en mis inicios era una buena elección para trabajar en orquestas de baile y música ligera, subsistir y pagarme las matrículas del conservatorio. Posteriormente, decidí cursar estudios formales de música y hacerme profesional. En el terreno del jazz comencé de forma autodidacta, es decir, de oído y sin nociones de lectura ni de lenguaje musical.
– Ha salido su disco en formato big band, bajo el nombre de Mode On, ¿La atrae más este formato de arreglos más orquestales que otros más reducidos?
– Chema Peñalver: He grabado con todo tipo de formatos, no obstante, pienso que todo jazzman, en algún momento de su trayectoria, debe intentar componer y arreglar para big band. Es más, incluso cuando he compuesto para grupos más reducidos, la perspectiva, la proyección, el sonido global, etc., siempre tienen como modelo o referencia el formato de orquesta de jazz grande. En definitiva, el propósito compositivo aspira a conseguir parte de la esencia de la big band.
– Mode On fue grabado en el año 2020, en diciembre, ¿Cómo operó la pandemia para su publicación? ¿Lo retrasó todo?
– Chema Peñalver: Durante el periodo de confinamiento impuesto por la pandemia del Covid-19 compuse un repertorio original y completamente inédito para la orquesta de jazz por excelencia: la big band. Poco después de la reclusión, siendo consciente de los riesgos pero sin perder nunca el sentido común, asumí el desafío de la grabación. Conseguí reunir a 17 músicos, valientes y emprendedores, organicé 4 ensayos y en diciembre de 2020 registré Mode on, mi sexto trabajo discográfico como líder.
Siempre me han gustado los retos, evidentemente con riesgo moderado o controlado.
El efecto de la pandemia no retrasó el proyecto, fue al contrario, fue el elemento que me impulsó a componer como forma de evasión, como una actividad de concentración y para estar en activo, es decir, Mode On.
– Dentro de su carrera ha tenido un episodio importante a tributos confesos a gente como Benny Goodman, ¿En Mode On hay algún tributo que no sea tan evidente como en el caso de su primer disco?
– Chema Peñalver: No hay tributo, ni demasiadas cuestiones extramusicales, básicamente es música pura, es decir, no está asociada a ninguna idea previa, programa o contexto que no sea lo puramente musical. No obstante, sin pretender ser música descriptiva, hay dos imágenes asociadas a los temas “First Lady” y “Casco Antiguo”, que luego explicaré, pero no hay ningún homenaje implícito. En cualquier caso, si mi padre estuviese en vida, me hubiera gustado que escuchara “Café swing”, es el estilo de jazz que solía escuchar y el que me inició en el terreno del jazz.
– Hablando de gente sobresaliente a la que merece tributar, ¿En qué instrumentistas se fija? ¿Tiene algún disco más cerca del reproductor que otros? ¿Es usted más de spotify, Itunes o escuchar discos a la “vieja usanza”?
– Chema Peñalver: Bueno, a mí personalmente no me gustan los tributos, prefiero escuchar el material original. En 2008 fue el baterista Jeff Jerolamon el que me propuso la idea de grabar un tributo a Benny Goodman. A pesar de que Benny ha sido una parte importante en el lenguaje de todos los clarinetistas posteriores mi respuesta fue: “pero si nadie toca ya en el estilo de Goodman”. Planificando la producción llegamos a la conclusión de que podíamos tocar el repertorio de la década de los 30 pero con la expresión y la musicalidad, tanto en las exposiciones temáticas como en los solos, desde el punto de vista de músicos actuales y con las influencias personales de cada uno. Me gustó este planteamiento y en 2008 publiqué el álbum por Sedajazz Records. Se lanzó como el primer disco de jazz liderado por un clarinetista español.
Mi principales influencias, además de Goodman, han sido Edmond Hall y Buddy DeFranco, éste último sigue siendo una referencia para continuar el estudio hacia un sonido más bebop y moderno, en este punto me encuentro.
Sobre las plataformas digitales, te comento que hace 3 meses que estoy en Spotify y ya tengo 2600 oyentes mensuales. Sin embargo, soy más de poner un Cd o un vinilo y escucharlo, saborearlo, estudiarlo durante semanas, etc. Entiendo que hay que actualizarse y comprendo el potencial de difusión y publicidad que tienen las plataformas digitales, es por este motivo que decidí incorporarme y no quedarme atrás. Aprovecho para compartir con todos vosotros el link de Spotify:
– En Mode On todas las composiciones están firmadas por usted, ¿Tuvo primero las mismas y después las adaptó a la música para big band o primero pensó en componer para una big band y después realizó las canciones? ¿Una combinación de ambas opciones?
– Chema Peñalver: En la faceta compositiva soy constructivista, parto de ideas muy pequeñas pero concisas y muy definidas, el motivo, la armonía, el ritmo, etc., se van convirtiendo en estructuras más grandes y poco a poco se van adaptando, modificando y transformando. Es cierto que a veces parto de una imagen sonora con toda la instrumentación pero no es el recurso más habitual. Por otra parte, supongo que todos tenemos un “cajón de sastre” donde conservamos retales que más adelante retomamos y se convierten en composiciones de mayor dimensión o envergadura. También hay temas que se quedaron sin grabar en otros discos por falta de tiempo o de presupuesto. Otros, como por ejemplo “Firts Lady”, originalmente fue compuesta para voz y grupo reducido, con el retraso de la vocalista en crear la letra perdí la paciencia y la pasé a formato de big band. “Clarinet a la cool” era una canción de estilo cercano al pop y se ha convertido en uno de los temas con más desarrollo, interludios, efectos antifónicos entre las secciones, etc.
– Háganos una presentación rápida de la banda en Mode On, destáquenos participantes en el disco y sus solos…
– Chema Peñalver: Músicos:
Trompetas: Manolo Díaz, Toni Porcel, Juan Moscardó, Adolfo Cebreiro
Trombones: Javier Llopis, Carlos Valls, José Javier Oliver, Óscar Torres
Saxos: Fran Conde, Celso Sorribes, Rafa Palomar, Iván Pitarch, Inma Martínez
Contrabajos: Natxo Navarro, Dani Fernández
Piano: Cayetano Balfagón
Percusión latina: Manel Chust
Batería: Jesús Gallardo
Chema Peñalver, clarinete, composición, arreglos y dirección musical.
Repertorio:
1. Mode On, solos: Chema Peñalver, clarinete.
Es un funky moderado, aunque dura unos 4 minutos la idea se aproxima al estilo de jazz progresivo, un ostinato de bajo que sirve de hilo conductor para toda la composición. El solo de clarinete irrumpe después del primer break como un despegue y es de carácter virtuosístico, sin llegar a ser muy contemporáneo, contiene pinceladas de moderno y es la carta de presentación del disco.
2. First Lady, solos: Chema Peñalver, clarinete
Hace referencia a la “Primera Dama”, esa mujer que acompaña a una autoridad y demuestra saber ser, saber estar, llega a ser la imagen de prensa, etc. Es un tema clásico de estructura AABA con el clarinete como voz cantante. El solo es de corte tradicional, de estilo pausado, con intención elegante y con cierto glamour. Hay guiños a la tradición y varias citas al solo de Parker en “Now´s the time”.
3. Slave, solos: Chema Peñalver, clarinete / Toni Porcel, trompeta / Celso Sorribes, saxo alto)
Es una composición con mucho desarrollo, intervenciones de todas las secciones en efecto anifónico, calls and responses y efectos Jungle style. Después del primer break y la intervención del clarinete, en el segundo solo aparece la trompeta en estilo Cotton Club con sordina y con efectos dramáticos, después un soli al unísono de la sección de trombones y finalmente un breve solo de saxo alto muy en la onda de West Coast.
4. Casco antiguo, solos: Chema Peñalver, clarinete / Javier Llopis, trombón / Fran Conde, saxo alto / Manel Chust, timbales. Inspirado en la imagen de los barrios viejos de Cuba inundados de música en cualquier rincón. Sin duda alguna, es un tema de latin jazz muy pegadizo y bailable con lucimiento del clarinete con respuestas del tutti, interludios entre solistas y 2 intervenciones más de trombón y saxo alto. Con un solo de timbales espectacular retoma el tema en forma de cha-cha-cha hasta la coda.
5. Café swing, solos: Chema Peñalver, clarinete / Juan Moscardó, trompeta / Iván Pitarch, saxo tenor / Natxo Navarro, contrabajo. El tema más largo del disco y con intervenciones de 4 solistas. Simplemente puro swing que intenta evocar el estilo de las big bands de Goodman o Basie.
6. Agridulce (Solos: Chema Peñalver, clarinete / Juan Moscardó, fliscorno / Fran Conde, flauta). Aunque se presenta como un bolero más o menos tradicional, la opinión de los oyentes lo considera como un tema muy original. Como el mismo nombre indica hace referencia a dos sabores que se entremezclan y esto se traslada a los 2 temas principales, uno dulce, melódico y lírico, y otro más ácido, de carácter español o aflamencado.
7. Carga y descarga, solos: Manolo Díaz, trompeta / Javier Llopis, trombón / Fran Conde, saxo alto / Cayetano Balfagón, piano / Manel Chust, congas)
Un mambo de exhibición que recuerda un poco a “Manteca”, este tema no hago solos, me limito a la faceta de compositor, se compuso para el lucimiento de la big band con intervenciones solistas e intercambios de 4´s.
8. Clarinet a la cool, solos: Chema Peñalver, clarinete / Toni Porcel, fliscorno / Celso Sorribes, saxo alto.
Inspirado en el cool jazz y que contrasta con “Clarinet a La Funk” de mi anterior trabajo “Blowing the Groove” (2018), se presenta como una melodía fácil, cantabile y muy sugerente, primero clarinete y sección rítmica y a continuación armonizada a 5 voces con los saxos. Interludios de la sección de metal con sordinas para crear esa atmósfera relajada y desinhibida, solos a medio volumen de clarinete y uno precioso de saxo alto evocando el estilo de Paul Desmond o quizás Art Pepper.
9. Moolongoo, solos: Chema Peñalver, clarinete / Inma Martínez, saxo barítono / Fran Conde, saxo alto / Carlos Valls, trombón / Manolo Díaz, trompeta.
En estilo second line, es el final de fiesta, rítmico y muy divertido como los desfiles después del funeral de New Orleans.
– ¿Qué supone para usted publicar en un sello como Sedajazz? ¿Es importante asociarse con un sello en pleno siglo XXI?
– Chema Peñalver: Es cierto que los sellos están perdiendo importancia en la actualidad debido al potencial de las plataformas digitales y la posibilidad que nos ofrecen de autopublicar nuestros trabajos y gestionar nuestros ingresos. De mis 6 lanzamientos 4 han sido publicados por Sedajazz Records, siempre he confiado en su labor, en su buen hacer y les felicito por su trayectoria musical y por su capacidad de gestión durante sus 30 años de historia.
– ¿Qué le diría a un músico joven desde su experiencia? ¿Qué recomendación extendería a un joven clarinetista que escucha a Goodman y que piensa que es lo mejor dedicarse al jazz? Con respecto a la anterior pregunta, ¿Le recomendaría ir por libre o tener la protección de una casa discográfica?
– Chema Peñalver: Si quieres llegar a profesional en la música estudia, trabaja y esfuérzate sin esperar recompensa, lo que tengas que hacer hazlo por vocación. Escucha a todos los músicos buenos que puedas y quédate con lo que más te guste y se adapte a tu personalidad. Tal vez el dinero llegue más adelante pero no debería ser la finalidad principal para dedicarte a esto.
Más que elegir el camino del jazz o tomar sólo como referente a Goodman le diría que ame toda la música en general, si decide dedicarse al jazz que tome elementos de todos los instrumentistas porque el instrumento sólo es el medio, el lenguaje y la expresión son comunes para todos los músicos.
Sobre las discográficas, si vas por libre, como yo que no he firmado un contrato discográfico en toda mi carrera (sólo acuerdos verbales, sin cláusulas ni obligaciones), pagarás el precio de ser independiente, tendrás que tomar decisiones de producción, coordinar a grupos de músicos, realizar labores de gestión etc., pero nadie te dirá lo que tienes que tocar, componer, grabar o publicar.
Es una elección personal.
– Si tuviese el poder dentro de su comunidad autónoma, ¿Cuál sería su primera medida para que los músicos tuvieran una vida más simple?
– Chema Peñalver: Ofrecería ayudas económicas destinadas a los músicos de directo que son los que más están sufriendo la crisis, también a la creación y edición de nueva música o recuperación y grabación del repertorio no publicado. Intentaría que dichas ayudas estuviesen completamente justificadas, es decir, que su resultado pudiese medirse o evaluarse como un beneficio o mejora de la sociedad.
Por otra parte, creo que el problema no está en la preparación de los músicos, la gran mayoría de los que conozco se dejan la vida para alcanzar un nivel competente, quizás se debería formar buenos gestores culturales para que se haga una política cultural de calidad.
– Permítanos la broma, dado un Mode On, ¿Hay un mode off?
– Chema Peñalver: Sí, cuando pase a mejor vida, supongo (risas).
– Podemos considerarlo como un músico ya veterano ¿Podría destacarnos alguna anécdota de sus actuaciones en directo?
– Chema Peñalver: Bueno, todavía no soy un veterano, tengo que decir que sigo estudiando, no con la intensidad de los primeros años, porque ya no dispongo del mismo tiempo y resistencia, pero sí con la misma ilusión, no me canso de indagar e investigar.
Anécdotas, pues de más joven, en una gira, llegamos al lugar del concierto, era pronto y todavía no había nadie en el recinto. Tocábamos al aire libre y había una especie de escenario enorme pero endeble, de aquellos que están montados a base de tablas de madera y caballetes, no nos gusto el sitio donde estaba colocado y entre todos los miembros del grupo decidimos moverlo. Se desplomó a tierra y tuvimos que montarlo apresuradamente antes de que llegara alguien de la organización.
Como curiosidad, os comento que siempre intento tocar de memoria, favorece la concentración y la expresión, tampoco me gusta leer en directo porque pierdo un poco el contacto visual con el público. Sin embargo, alguna vez me he llevado algún susto y he olvidado parte de la melodía en las exposiciones. Casi siempre he salido airoso de la situación, tal vez porque la distracción ha potenciado la improvisación, la toma de decisiones que no estaban previstas y caminos que no estaban planificados.
– ¿Cree posible un tour y una gira de presentación de un disco de big band como Modo On o probablemente estamos en el peor momento para proponerla?
– Chema Peñalver: Todavía no hay confirmaciones pero hay dos festivales de jazz internacionales interesados en la propuesta, en cuanto se haga público les informaré. De todos modos, la finalidad de este proyecto nunca fue hacer giras, fue la grabación del disco, el objetivo está logrado.
– Gracias por su tiempo, Chema, si quiere añadir algo ahora es el momento. ¿Qué tal un saludo a los lectores de Canción a quemarropa?
– Chema Peñalver: Muchas gracias por la entrevista Héctor, ha sido un placer. Amigos, espero que se encuentren muy bien de salud y puedan disfrutar de la música y del jazz como siempre. Gracias por formar parte del público de Canción a quemarropa.
Foto: promocional.