Songs from my father es el nuevo y muy esperado disco del erudito musical Gerry Gibbs. Se trata de su decimotercer lanzamiento como líder, el baterista, percusionista y director de banda, así como arreglista, Gibbs presenta una obra maestra de dos discos con cuatro versiones de su aclamado trío que lleva la denominación de Trasher Dream Trio.
Bajo su inteligente dirección, la banda de titanes del jazz rinde un homenaje muy sentido al legado musical del padre de Gerry, Terry Gibbs, uno de los últimos arquitectos vivos del be bop e innovadores del instrumento de percusión: el vibráfono.
Para este objetivo Gerry seleccionó nada más y nada menos que 18 melodías de la vasta discografía de su padre e interpretó el material de manera atemporal a través de su propio prisma y lente compositivo, con arreglos ingeniosos y modernos. Además Songs from my father tiene la última interpretación grabada con el gran Chick Corea, genio del piano y que además falleciera hace algunas fechas. También incluye una de las melodías compuestas por Chick específicamente para este proyecto.
Con Gibbs en la batería, ha tenido la posibilidad de grabar en este disco con sus estelares tríos. Aquí se pude disfrutar de excelentes músicos como por ejemplo el mismo Corea, Ron Carter, Kenny Barron, Buster Williams, Patrice Rushen, Larry Goldings, Geoff Keezer y Christian McBride.
Una pandemia global no podía frenar a este prolífico hombre del jazz, sino que, muy al contrario, lo inspiró positivamente dejando un eco de una impresionante temporada de producción creativa. Gibbs presenta este disco recién salido de su obra épica de 2019 que llevó por título Our People, que desafía el género musical. Algunos críticos lo definieron como “piezas ingeniosamente superpuestas que a menudo se acercan a lo cinematográfico… todo una hazaña”.
También tuvimos acceso a su anterior Emotional Pandemic de 2020, un disco de 18 pistas compuesto totalmente e interpretado por su propia persona. Los 8 instrumentos. De hecho este fue el lanzamiento con el que llamó la atención del mismísimo Chick Corea. Corea preguntó al batería el proceso para grabar todos los instrumentos. Esa mínima conversación evolucionó a la posibilidad de la colaboración y el concepto nació: era posible lanzar un doble disco producto de las colaboraciones con cuatro asombrosos tríso, incluida la mentada colaboración con Chick y con Ron Carter.
En ese estado de cosas, más tarde Corea pidió involucrarse todavía más profundamente en la labora, en la música. Compuso una pieza original bajo el título de Tango For Terry, dedicada especialmente para Terry Gibbs y arreglando, incluso, dos piezas para el disco.
Gibbs comenta “Lo que quería hacer parecía casi imposible con el covid. Había mucho miedo, viajes, precauciones de seguridad y logística ¿Cómo se coordinaban 4 tríos cuando una enfermedad se propaga por todo el mundo y por USA?» Ese era el reto y sin embargo Gibbs vio la oportunidad y no se rindió organizando varios viajes para capturar los sonidos. Sin duda, ha merecido la pena.