Musicalmente, Cosmic Room 99 se nutre de influencias de una amplia gama de fuentes, incluidos los ritmos obsesivos de The Velvet Underground, la psicodelia onírica de Pink Floyd de Syd Barrett, las armonías de «Pet Sounds» de The Beach Boys, el agudo feedback de The Jesus and Mary Chain, la austera ola de Joy Division y los mundos profundos y abismales de Bauhaus, todos unidos por una actitud punk.
Formada a finales de 2022 en Treviso, Italia, la banda está formada por Antonio Angeli (voz/batería) y Matteo Scarpa (voz/bajo), ambos miembros de Kill Your Boyfriend, y Diego Menegaldo (voz/guitarra), ex guitarrista de New Candys.
Las bases musicales de la banda se establecieron durante el confinamiento, cuando los miembros buscaron refugio de la alienante rutina reuniéndose en un pequeño estudio de grabación casero. Este entorno les permitió intercambiar ideas, impulsados por una necesidad primordial de compartir y un deseo de volver a actuar en clubes oscuros, llenos y sudorosos.
Este período de aislamiento también les brindó la oportunidad de reflexionar sobre las verdaderas prioridades de la vida y los problemas sociales, revelando una tendencia a aceptar incluso los peores aspectos de la sociedad como la norma. Esta constatación influyó en el sonido y los temas líricos de la banda, explorando la desilusión con una sociedad distópica y la verdadera naturaleza del comportamiento humano.
El nombre de la banda, «Cosmic Room 99», se inspiró en un documental llamado «The Cosmic Room», que cuenta la historia de Bob Cohen, empleado de la OTAN, que descubre accidentalmente un plan de alto secreto para erradicar parte de la población mundial para mantener la sostenibilidad de la Tierra. El número 99 en numerología representa a alguien que usa sus dones para hacer del mundo un lugar mejor, lo que encapsula el espíritu de la banda.
El álbum se grabó principalmente en su estudio casero en Treviso, Italia, donde los miembros de la banda tocaron varios instrumentos, creando un trabajo colaborativo y cohesivo. Para agregar calidez a su sonido, grabaron voces y baterías analógicas y mezclaron las canciones en Overdrive Studio en Treviso, con el productor e ingeniero de sonido Edoardo «Dodi» Pellizzari. La masterización final estuvo a cargo de Collin Jordan en The Boiler Room en Chicago, EE. UU., agregando el toque final a su música.
Photo credit: Francesca Janes