
Foto: Wikipedia. William P. Gottlieb Se cumple 96 años del natalicio de Charlie Parker. Charles Christopher Parker, Jr. nació en Kansas City un 29 de agosto de 1920. Yardbird, o simplemente Bird, fue considerado como uno de los saxofonistas y compositores más importantes de la denominada música moderna. El saxofón alto fue sin duda su especialidad y ha sido junto a Louis Armstrong, Duke Ellington, Miles Davis o Dizzy Gillespie, una figura dentro del jazz.
Podemos decir, sin temor a equivocarnos que Parker, junto con Dizzy y con Bud Powell, fue uno de los iniciadores del be bop. Su estilo se fue apartando de otros ambientes que no hacían más que acercarse al swing, vertiente de moda en aquella época. Parker basaba su improvisación en melodías modificando los acordes. Debemos recordar también que Charlie Parker fue el creador de estándares de jazz respetados por todos los estudianes del género. De esta manera, cabe destacar que son canciones suyas algunas como ‘Ornithology’, ‘Anthropology’ o ‘Scrapple from the apple’.
Éstas han sido copiadas por todos los saxofonistas, una y otra vez. Como si para aprender saxofón de jazz hubiese que pasar de manera obligatoria por una estación llamada ‘Bird’. La prolífica discografía de este genio pasa por sus grabaciones junto a Dizzy Gillespie, en discos como ‘Bird & Diz’, editado por Polygram en el año 1950. Discográficas como Prestige, Verve o Columbia fueron sus casas como creador.
Dentro de la vida de Charlie Parker se describen una buena cantidad de anécdotas, propias de una vida oscura y martirizada. Recordamos por ejemplo, la película que dirigió Clint Eastwood en 1988 en donde el actor Forest Whitaker asume el papel de Parker, en donde se cuentan buena parte de ellas. Por su parte, también fue fuente de inspiración al renombrado cuento ‘El Perseguidor’ del argentino Julio Cortázar (1959).
Han sido innumerables los músicos y los saxofonistas que han querido acercarse musicalmente a los parámetros de Bird. No habría forma de compilar todos los homenajes -implícitos o no- de los que ha sido objeto la figura de Charlie. Como muestra un botón, nos referimos al disco del gran contrabajista Charles Mingus: «If Charlie Parker was a gunslinger, there’d be a whole lot of dead copycats». O lo que es lo mismo, Si Charlie Parker hubiese sido un pistolero, hubiese un montón de copiones muertos.
Sus problemas con las drogas, sus giras por Europa, el trabajo en quintetos que incluían a Miles Davis o a Max Roach, múltiples conflictos conyugales, sus presentaciones con artistas como Gillespie en el Carnegie Hall de New York fueron parte de su vida, obra y para algunos milagros.
En la pobreza más extrema, que hizo que falleciera una hija por no tener dinero para pagar las atenciones de una neumonía, Parker se aproximaba al final. Después de dos intentos de suicidio murió oficialmente de un colapso cardiocirculatorio, el 12 de marzo de 1955, a los 34 años de edad.