Foto: Promocional. I called him Morgan nos descubre más detalles de la muerte de uno de los héroes más importantes de la trompeta en el jazz. Décadas después de salir de prisión por haber asesinado a su marido, el músico de jazz Lee Morgan, Helen reflexiona sobre su legado y sus vidas. Un periodista se encuentra con este tremendo «tesoro», en forma de historia.
Dentro de los reconocidos géneros de los documentales de música y conciertos, la plataforma de películas online, Netflix, da acceso a uno de los documentos de mayor calado relacionados con músicos de jazz. En esta ocasión, se trata de una reflexión histórica y profunda sobre la muerte de uno de los trompetistas más importantes del estilo, Lee Morgan.
El documental es extraordinariamente prolijo a la hora de señalar los acontecimientos. Con la intervención de importantes compañeros de trabajo como el aclamado saxofonista Wayne Shorter, o por ejemplo el bajista Jymie Merritt, el documental visita lugares como el Slug’s Saloon (242 East 3rd Street).
El Slug’s había ganado una importante fama en el Manhattan de los años 60. Incluso, habían tocado en él artistas de la talla de Sonny Rollins, Albert Ayler o el que está considerado como el padre del free jazz, Ornette Coleman. Éste fue uno de los clubes de actuación del trompetista y en donde se desarrolló la brutal escena final de su vida. Donde, en definitiva, Helen Morgan le quitó la vida.
El Slug’s cerró definitivamente a finales del año 1972, meses antes había fallecido el trompetista entre el polvo de su suelo.
Con la entrevista a Shorter, se repasa de manera fiel los momentos de más álgida fama de Morgan, con sus discos en Blue Note y las actuaciones en The Jazz Messengers con Art Blakey. De hecho, Wayne explica la manera tan particular que tuvieron de enrolarse en la banda del prestigioso batería.
En una de esas giras, Lee Morgan cayó en la depresión y en el hondo hoyo de las drogas. Fue cuando Art Blakey tuvo que despedirle y, específicamente, Shorter señala como no era necesario para ser un buen músico ir drogado. De hecho, en un momento, Wayne deja claro que él nunca participó en ese adictivo juego. Helen Morgan le sacó del mal camino. Según ciertos testigos y amigos de la pareja, Helen rehabilitó a Lee no dejándole sólo en ningún sitio y actuando como manager además de como pareja.
Helen grabó la entrevista que sirve como hilo causal del documental a mitad de los años 90, justo un mes antes de fallecer.
El trabajo es un despliegue de buena música y también una importante pieza cinematográfica desde el punto de vista visual. El documental ha sido dirigido por Kasper Collin. La cinta está disponible en inglés y en multitud de subtítulos, entre otros el español.
Felicidades por el título porque no tiene desperdicio, especialmente indicado para curiosos sobre la historia del jazz y amantes de esa música.
Para conocer más sobre Lee Morgan accedemos a wikipedia:
Al cumplir los 14 años Lee Morgan recibe una trompeta como regalo de su padre, con la que pronto empiezan a destacar sus habilidades, para poco después unirse a la big band de Dizzy Gillespie cuando tenía 18, permaneciendo en ella dos años. Empieza a grabar como líder en 1956 (tras sólo 4 años tocando), especialmente para Blue Note con la que grabó 25 discos. Después de la prematura muerte de Clifford Brown en 1956 fue considerado como el sucesor de Brown.
En 1957 graba junto con John Coltrane el célebre Blue Train, y ese mismo año dos de sus mejores discos Candy y City Lights. Un año después entra a la formación de los Jazz Messengers de Art Blakey donde colabora en algunos de los discos más representativos, como Moanin’.
Después de visitar a su familia en su natal Philadelphia e intentar deshacerse de su adicción a la heroína sin lograrlo, Lee regresó a Nueva York y grabó el álbumThe Sidewinder. Grabado en diciembre de 1963, el disco se convirtió en uno de los más vendidos del sello Blue Note. La razón principal de su éxito fue su pieza homónima. Un blues de 24 compases con una melodía sencilla de recordar tocada por el mismo Lee Morgan y su amigo Joe Henderson. Al estilo le llamaron soul jazz.
Abandona la formación a principios de los ’60 y graba en el ’63 el extraordinario The Sidewinder que es además uno de los discos más vendidos de la Blue Note y la historia del jazz.
Durante los sesenta continuó grabando una serie de discos de gran calidad y colaboraciones con otros músicos (Destacan A Caddy For Daddy de Hank Mobley o Night Dreamer con Wayne Shorter). A principios de los setenta, Morgan colabora con Roland Kirk para apoyar a la asociación «Jazz and People Movement», dedicada a la mejora de las condiciones de trabajo de los músicos de jazz en los Estados Unidos.
El 19 de febrero de 1972, mientras Lee actúa en el club Slug’s Saloon de Manhattan su mujer, Helen le sorprende con otra. Tras una discusión, ésta dispara contra Lee Morgan acabando con su vida. Tenía una relación difícil con su mujer, pero le había ayudado a dejar la heroína.
En 2016 el realizador Kasper Collin cuenta historia de la relación con su mujer y su trágica muerte en el documental «I called him Morgan», que recibió el premio al mejor filme internacional del Festival Beefeter In-Edit.
Lee Morgan murió con 33 años habiendo dedicado su vida al jazz. Está considerado como el músico más representativo del hard bop y uno de los trompetistas más creativos de la segunda mitad de siglo.