Momento para hacer recapitulación de lo mejor del año saliente, 2024 lo que hemos llamado la cosecha. Debería ser innecesario decir algunos factores previos como que por ejemplo este servidor no ha visto todo lo que ha salido en el cine y también que se trata sólo de una lista meramente personal de apuntes de momentos buenos de cine. También habría que añadir que mayoritariamente está a contrapelo de lo que la crítica mayoritaria ha opinado.
Son películas vistas en 2024 y es posible que alguna ya haya sido premiada en los Oscars por haber sido publicada en 2023, como Poor Things, pero hechas estas precisiones, empecemos porque el puñado de películas salvables o directamente recomendadas han sido unas cuantas:
Civil War de Alex Garland
Escribíamos en la crítica:
Civil War narra la revuelta de California, Florida y Texas en una suerte de Alianza del Oeste americana que amenaza en guerra de secesión al resto de los USA y su intención es llegar al mismo Capitolio de Washington para arrancar el poder y extirparlo de manera salvaje. Probablemente inspirada en la invasión del capitolio en los momentos no tan pretéritos, nuestros peones, contadores de historias a través de un objetivo, fotoperiodistas, están en ese marco de ajedrez brutal y se encaminan a narrar las vicisitudes de la lucha. El presidente está anclado en La Casa Blanca y sitiado, mientras va engañando con los medios de comunicación despreocupando a gran parte del país.
La película es terrorífica por momentos porque no ahorra a la hora de mostrar los horrores de la guerra. Civil War es una suerte de buddy y road movie, una odisea de colegas en un coche que van teniendo conflictos allá por donde pasan.
Nosferatu de Robert Eggers
Vista en los últimos compases de 2024, estrenada el 25 de diciembre para más señas.
El espectador encuentra en Eggers a un director que se preocupa por el acabado final y que le entretiene aún en una historia sabida, en terreno confiable y conocido. Es más, Eggers trata al respetable de manera inteligente, esto es más que algunos otros y es de alabar.
En Nosferatu se va repasando el inmortal libro de Stoker pero con alguna aliteración que en algunos de los casos nace del estilo impuesto de las versiones de 1922 y de 1979, aquella Nosferatu de Werner Herzog con Klaus Kinski, Isabelle Adjani, Bruno Ganz, del personaje y un poco también de la visión de Francis Ford Coppola de los años 90 ma non troppo.
Cónclave de Edward Berger
Escribíamos en la crítica:
Conclave es una película difícilmente imaginable sin el impactante y efectivo reparto con el que cuenta. Una película “coral” aunque cuenta con un aval de entrada, el trabajo inagotable de Ralph Fiennes -que además carga con el papel de protagonista claro- pero también por una estupenda cobertura de otras estrellas de la pantalla, como los veteranos John Lithgow, Stanley Tucci, Carlos Diehz, Sergio Castellitto e Isabella Rossellini.
Los actos están linealmente organizados y han sido bastante cuidadosos -sospechamos- a la hora de disponer la elección de un papa desde la muerte de uno hasta la sucesión (fumata blanca).
Megalópolis de Francis Ford Coppola
Escribíamos en la crítica:
Megalópolis, a lo mejor en contra de la mayoría del cine actual, narra un sueño, se encarga de hacer un paralelismo interesantísimo y bien escrito entre la caída de la civilización romana y la actual, entre Nueva York, Roma y Nueva Roma. Es un ejercicio onírico y adecuado de los tiempos que corren, como se encarga de confesar el mismo director, una fábula.
Los indicios van dando paso a la nueva Era a la nueva casa de todos nosotros, haciendo pacto entre las fuerzas vivas de las ciudades y de los Estados. De eso se trata.
Poor Things de Yorgos Lanthimos
Escribíamos en la crítica:
Poor things es una suerte de Prometeo Moderna, un ser injertado que vuelve a la vida. Una mujer que es regresada a la vida de entre la muerte gracias a la intervención de un Doctor muy particular (Willem Dafoe). Entre el blanco y negro y el colorismo a veces surreal, lo mejor que se puede hacer con esta cinta es tirarse por el tobogán de las emociones y dejarse mecer.
Uno de los fuertes de la película es la cantidad de escenarios locos y un maravilloso reparto. El espectador empatiza casi forzosamente con el personaje de Emma Stone (Bella Baxter) que viaja a través de su ingenuidad más que infantil por el amor, el sexo desbordante y su forma de filosofar la vida.
*se nos quedó en el tintero otra película de Lanthimos, Kind of Kindness publicada en 2024.
Furiosa de George Miller
Escribíamos en la crítica:
Furiosa coge los frutos de la semilla sembrada en la que ya parece lejana Fury Road, de 2015 y que tantos seguidores construyó para esta saga que fue creada en el último año de los 70 y se mantuvo en el tiempo, sobre todo en los 80, hasta que volvió tantos años después a mitad de la segunda década de los 2000. No en vano, el grupo de películas siempre supo alimentarse de figuras de épocas muy concretas como Mel Gibson (al que vio crecer) y la cantante Tina Turner, Tom Hardy, Charlize Theron ¿Quién no recuerda Salvajes de la autopista del 79 o Más allá de la cúpula del trueno, en el 85?
Joker 2 – Folie à Deux de Todd Phillips
Escribíamos en la crítica:
Con ese difícil listón (de Joker, primera parte) -y en esto no estamos de acuerdo con casi el resto de la crítica- Phillips vuelve a recrearse en el universo de manera admirable. Parecería que ha ido realizando trabajos de esta calidad durante mucho tiempo, pero no, Todd solo era el director de novelas y películas de risa fácil y sarcásticas. Y ha sabido ponerse en la piel de la polémica, del Joker de la baraja.
Gladiator 2 de Ridley Scott
Escribíamos en la crítica:
Gladiator 2 navega en el mismo surco de mar y vuelve a pasar por algunos de los capítulos de la primera entrega. Desde ese punto de vista, incluso se podría alguien podría definir esta cinta como un remake más que una segunda parte. No obstante lo dicho, puede considerarse el film como un poco más de aquello que hizo lo famoso, aquella frase “lo que hacemos en esta vida tiene eco en la posteridad”. Es como si Scott nos quisiera contar que ésta, su historia, fuese cíclica, que se repite continuamente en las sucesivas generaciones.
Dune 2 de Dennis Villeneuve
Escribíamos en la crítica:
Dune 2 finiquita la saga con el resto de historia y Villeneuve sigue tirando de preciosismo estético, intentando que cada uno de sus planos fueran un cuadro. El ya veterano director nos asombra con la inmensidad de la duna y con los gusanos del desierto de manera francamente inteligente. Villeneuve ha sabido como captar la emoción y contener a su equipo y eso se nota de manera magistral en algunos momentos del film. Tanto el diseño de producción, como el diseño de sonido, de vestuario, de luz y de fotografía están expuestos a la son de la historia, en fin todo lo que tiene que estar en una película para que sea entretenida e incluso, teniendo en cuenta el ritmo de la cinta, dinámica.
Horizon: An american saga (episodio 1) de Kevin Costner
El veterano actor, productor y director Kevin Costner quiso reverdecer sus laureles gracias a un western. Probablemente él tuvo su cumbre cinematográfica con Bailando con Lobos y lejana queda ya. Sin embargo, nos sorprende con una historia calmada, armada de buen cine y sin sobreexplicación dentro de lo posible. La película es atractiva y por desgracia pasó como una exhalación por las salas de exhibición y, por lo general, hubo que verla en la pantalla pantalla. Cuestión ésta que la hace menor pues esos grandes valles y montañas merecen la pantalla más enorme. Quizás Costner quiso hacer una serie en los cines, una pena que se quedara en esa tierra de nadie sobre todo porque en taquilla fue mal. Esto, no lo olvidemos, no la hace peor.
Fallen Leaves de Aki Karismäki
Escribíamos en la crítica:
El alcoholismo, el paro, la depresión social, la drogadicción son algunos de los asuntos abordados de manera dura y cruel. Película realista y dura que no deja indiferente a nadie. El director, Aki Kaurismäki no se recrea en ninguna de las circunstancias y probablemente la falta de presupuesto (según algunas fuentes rondaba el 1.5 millón de euros) obra en su contra. Sin embargo, en lo que es prolijo el film es en el guion. Y eso está a prueba de balas. Es la historia de cómo te dejan en paro si te rebelas, es la historia de cómo te pueden contratar sin papeles, es la guía de despedir a trabajadores porque se llevan a su casa comida caducada que iba a acabar en el contenedor de la basura.
Perfect Days de Win Wenders
Perfect Days, se llama. Las misiones no son nada del otro mundo, solucionar su vida con un trabajo de limpieza de inodoros públicos, realizar un tres en raya a distancia con un desconocido, sacar fotos a árboles. Esa es su vida llena de placeres mundanos como la lectura y por supuesto la buena música americana, combinación de rock, soul y todo ello en cassette retro que contrasta con la furibunda y moderna ciudad.
En ese sentido, hay que estar bastante en la línea de Wenders que ha sido director de muchas películas en una carrera de reconocimientos durante décadas y décadas de trabajo duro y que ha sido lo suficiente prolífico para no cogerles despistados.
Wenders sigue firmando cada fotograma como un lienzo, con algunos colores pastel, y se deleita con la ciudad, con la gran ciudad, en este caso Tokyo.
La Sustancia de Coraline Fargeat
Escribíamos en la crítica ¡Y a pesar de lo cual la recomendamos!:
Establecida la rica base de la película después, el film empieza a derivar y a caer en un guion que no está del todo completo, que va cayendo en demasiadas evidencias y que hacen de la película algo verdaderamente previsible. Todos sabemos que todo va a ser un estallido de sangre y lo vemos venir. Como el muro que va a acabar con la vida del motorista y que es demasiado tarde para esquivar.
Todo está tristemente telegrafiado y la incógnita que deja la película es simplemente cual es la trastada y animalada que nos va a dejar con la boca abierta. Todo hecho, hay que decirlo con toda la cantidad de gore permisible en los sueños más abyectos de H.R. Giger. El baño de sangre es cuestión de tiempo.
El Conde de Montecristo, de Alexandre de La Patellière, Matthieu Delaporte
Los franceses siguen haciendo sus revisiones de sus grandes clásicos y por supuesto de los más grandes exponentes de su literatura es Alejandro Dumas. De las revisiones de Los Tres Mosqueteros siguen estas lecturas de grandes novelas echadas al presente, con el look de nuestros días. Y ni tan mal. Entretiene pero parece algo larga, el episodio más interesante es cuando Edmundo Dantes está en prisión y empieza a urdir su venganza. Muchas críticas por el poco cambio en décadas del personaje son bastante olvidables.
Jurado Número 2 de Clint Eastwood
Por desgracia, Clint Eastwood no vuelve por sus fueros en esta última cinta judicial. Bebiendo de fuentes como Doce hombres sin piedad se podría pensar que el nonagenario director iba a hacer algo bastante más decente. No está a la altura de su filmografía -ni siquiera de la últimas grandes como The Mule (2018) o Richard Jewell (2019) que eran aún así entretenidas-. Eastwood nos cuenta el remordimiento de un jurado y el protagonista es más Nicolas Hoult está por debajo de otros papeles de menor entidad como el de J.K. Simmons.
El Ministro de Propaganda de Joachim Lang
Gran sorpresa, El Ministro de Propaganda se basa en la vida y obra de Joseph Goebbels configurado en una película alemana que hace recuento y pasa factura de este hombre con pinta de Bon Vivant. A base de reconstrucción pero en ocasiones en película de la época se retrata muy bien a la dolce vita de este sujeto con su tragedia personal y por supuesto entra en los peligros de llevar su teoría al extremo: la publicidad a toda costa. Magnífica película de la que esperábamos menos. Alemania inició probablemente con El Hundimiento una serie de películas que habla de su Historia cercana más desastrosa y El Ministro de Propaganda sigue con esa intención.
Oh Canada de Paul Schrader
Escribíamos en la crítica:
Vista sobre la bocina de 2024, un año que se va
El veterano Gere se echa a la espalda toda la propuesta y es valientemente secundado por excelentes lugartenientes. La película es básicamente una entrevista y los flashbacks que ésta provoca. He ahí la habilidad de la película, involucrar al espectador para que vaya recopilando cada trocito de su puzzle. Ir haciendo acopio de cada estadio vital del protagonismo con el influjo de la farmacopea correspondiente.
Foto: promocional de la película Megalópolis.